1. SE AGRADECIDO Y RESPONSABLE CON TUS ANTEPASADOS.
La gratitud y la responsabilidad son virtudes que deben acompañar a los sentimientos humanos con respecto a los antepasados.
Vivimos gracias a todas las personas que han conformado lo que somos en el presente. Todos y cada uno de esos ancestros han trabajado, sufrido, gozado, vivido numerosas experiencias de las que tenemos nula o escasa información. No porque “es cosa del pasado” debemos olvidar.
Dar las gracias es un acto que procede de personas nobles de corazón, que saben apreciar la sencillez y complejidad de la vida como parte de un todo. Ser agradecidos es uno de los bienes más preciados del ser humano, es un acto de aprecio, generosidad, bondad y reconocimiento. Dice un proverbio: “No hay mayor desprecio que el no aprecio”.
El siguiente paso a la gratitud es la responsabilidad. Cuando se agradece, aparece una sensación de responsabilidad que nos dice, de una manera consciente, que tenemos que asumir las consecuencias de las decisiones que hayamos tomado.
Todo el trabajo y el esfuerzo que han hecho nuestros padres, debe ser agradecido, y consecuentemente, es una responsabilidad mantener e incluso mejorar ese trabajo y ese esfuerzo que han realizado durante sus vidas.
2. LAS CREENCIAS Y LA FE TE AYUDARÁN EN LOS MOMENTOS DIFÍCILES
La fe proporciona a los creyentes de cualquier doctrina seguridad y confianza. Se manifiesta por encima de la necesidad de poseer evidencias que demuestren la verdad. La seguridad que proporciona la fe se basa en creencias que no están sustentadas por pruebas, es decir, no tiene ninguna base científica. Sin embargo, proporciona un grado de seguridad que es el resultado de ofrecer algún tipo de promesa fuera de nuestro entendimiento. A los humanos nos gusta el misterio.
A medida que pasan los años la fe de muchos ancianos se hace cada vez más fuerte, es como si, al decepcionarse del mundo, que está lleno de explicaciones para todo, se busca la seguridad en el más allá donde no hay que explicar nada. Sucede lo mismo cuando sufrimos un percance y decimos expresiones como, “¡ayúdame Dios mío!, o cuando necesitamos del aliado supremo para garantizar nuestra actitud y decimos, “te juro por Dios que…! Dios es el argumento supremo y último.
El estado de la mente y la percepción que se tiene acerca de un suceso o cosa, es lo que realmente importa, no si estás en la razón o en la sinrazón. No le discutas a nadie su fe en los momentos difíciles pues, posiblemente, ES LO ÚNICO QUE LE DA PAZ.
La intangible fe y la tangible religión, son de gran ayuda en los momentos difíciles, y esto es lo único que importa.
3. LAS CREENCIAS FIRMES REFUERZAN LA CONFIANZA
Cuando se tiene una creencia firme, se inspira confianza, la confianza anima a continuar hasta alcanzar la excelencia y de ahí a la maestría.
Las creencias se forman a lo largo de la infancia y siguen un proceso en escalera que sigue el siguiente camino:
1. EXPERIENCIA durante la infancia. Aquí influyen numerosos factores y destacamos los siguientes: familia, educación, ambiente, costumbres, religión, rituales, cultura…Todos estos y, muchos más, son circunstancias vividas durante la infancia que van a troquelar la fe de una persona adulta.
2. Pasada la serie de experiencias infantiles, se entra en una fase de formación en la que se llega a la CONCLUSIÓN de que, “yo soy lo que he aprendido”.
3. Pasada la adolescencia, se entra en un periodo de GENERALIZACIÓN. En esta fase se invierte en proceso que antes era de afuera–adentro (aprendizaje) y ahora es de adentro–afuera (comunicación y juicio). Todo se ve según lo aprendido en las fases anteriores y se juzga consecuentemente.
4. Por fin, se alcanza la fase en la que, todo lo que no se ajuste a los conceptos aprendidos, no se acepta. Se entra en la CREENCIA. En esta fase se cierra el baúl a todo lo que no cumpla con lo aprendido. Es una zona de confort que da mucha seguridad y confianza. Se buscan amigos, colectivos, partidos, religiones, afines que creen en lo mismo y buscan reunirse para ser más fuertes y protegerse en el grupo.
No decimos que, “yo creo en la creencia”, sino “a la gente la creencia le da confianza”, mejor “a mucha gente le da confianza” o, mejor aún, “a algunas personas le da confianza”… En fin, “los caminos de Señor son infinitos”. Cada uno, según su creencia y su conciencia, busca su “zona de confort”.
5. A LOS ANTEPASADOS DALES CARIÑO, Y A LOS DESCENDIENTES EJEMPLO.
La gratitud alanza su máxima expresión de nobleza cuando agradeces a los que han pasado antes por tu vida y te han puesto aquí. Recuérdalos con ese tipo de cariño que se refleja en una sonrisa silenciosa dirigida al difunto, donde estas tú y el recuerdo del antepasado en soledad , nadie más. Las alharacas son para los vivos.
A tus descendientes dales el cariño y ejemplo. El cariño viene de tu alma y el ejemplo de tus acciones. Vive dando ejemplo de honestidad. Ser honesto es esforzarse por hacer algo útil en beneficio de los demás, sin esperar nada a cambio.
La honestidad, hace referencia a un conjunto de atributos personales, como la decencia, el pudor, la dignidad, la sinceridad, la justicia, la rectitud y la honradez en la forma de ser y de actuar…¡Casi nada!
Si hacer todo lo descrito con tus descendientes, te puedo asegurar, que te irás de este mundo con una sonrisa de oreja a oreja.
6. RESPETA A QUIENES PRACTICAN LA RELIGIÓN E INTENTA COMPRENDERLOS
Todas las religiones tienen como finalidad ayudarte durante tu discurrir por la vida y darte consuelo en el momento final.
Solo estas dos finalidades merecen ser respetadas. Si una religión habla de matar, torturar, amputar, …causar sufrimiento, es evidente que hay que separarse de ellas e incluso combatirla, pero no hablamos entonces de combatir una religión sino a un fanatismo sectario.
Todas las religiones no violentas, deben ser aceptadas y respetadas. De no hacerlo así pasarás la vida de discusión en discusión hablando sobre un tema del que nadie tiene ninguna certitud, es decir; hablaras de las formas, pero nunca del fondo porque para conocer la verdad, tienes que morir, y eso es un asunto muy oscuro,… pero muy oscuro…Es mejor vivir sin enemigos.
Es cosa del ego. El ego siempre quiere tener razón. El ego es como un fantasma sutil que, al reconocerse como tal, hace todo lo posible para hacerse notar. No soporta que se le lleve la contraria y siente esta circunstancia como si le fueran a matar. Cuando se habla de fe, el ego se siente molesto por que tú crees en algo que el propio ego desea, una creencia, y para irritarlo más aún comprueba como la gente se reúne (religión) alrededor de algo que es un espíritu que es, precisamente, lo que el ego desea. Entonces comienza la discusión, la lucha e, históricamente demostrado, la guerra.
Solo hay una solución: aceptación, comprensión y no batallar.
7. TRATA A LOS DEMAS COMO QUISIERAS QUE LOS DEMÁS TE TRATEN A TI.
En la actualidad la falta de respeto, la ausencia de modales y el comportamiento desconsiderado de muchas personas es un problema muy serio. Se esta olvidando desde edades tempranas las palabras “por favor” o “gracias”. Se abusa del uso del móvil en sitios públicos e Internet es un campo minado de mala educación.
Cuando tratamos con la gente debemos tener claro que los BUENOS MODALES y las expresiones que usamos diariamente son nuestra seña de identidad, se llama; EDUCACIÓN. Ya puede ser en el trabajo, con los amigos, dando una clase o en medio del campo, para vivir sin estrés y en equilibrio con todo, es esencial vivir en un mundo donde impere EL RESPETO Y LA CONSIDERACIÓN. Trata a los demás como quisieras que te traten a ti y, si no te importa como te traten, estarás perdiendo la grandeza de lo mejor de las relaciones humanas, estarás cayendo en la vulgaridad. Lo ordinario, basto, ramplón, bufo no puede nunca llegar a ser, “lo normal”.
8. ESTUDIA ALGUNA DE LAS RELIGIONES MÁS IMPORTANTES.
“Existen aproximadamente 4200 religiones vivas en el mundo. Una encuesta mundial realizada en el año 2012, determinó que el 59% de la población mundial se declara “religiosa” y el 36% como atea. Las mujeres son más religiosas que los hombres. Muchas personas siguen, si su tradición lo permite, varias religiones simultáneamente (como el sincretismo de la India o en los pueblos andinos).
Desde nuestro cristianismo, con 2200 millones de creyentes en un solo Dios, igual que el islam con 1600 millones; el hinduismo con 1050 millones (entre los cuales se mezclan los politeístas (con 300 millones de dioses, no me he confundido) y los monoteístas (que tienen por Dios a Brahma); el budismo
(que no tiene un Dios sino una filosofía) con 488 millones y; el sintoísmo, (sintoísmo quiere decir “camino de Dioses), con 104 millones de creyentes…todavía faltan unas cuántas religiones hasta las 4200 catalogadas…Cada una con su Dios o, dioses, sus reglas, creencias, entendimientos… Un verdadero lío.
El conocimiento y comparación de varias religiones te dará siempre un enfoque nuevo del ser humano y descubrirás que TODAS DICEN LO MISMO, pero desde culturas diferentes. Sucede lo mismo que con los idiomas; investigaciones recientes han llegado a determinar, que el cerebro piensa de forma diferente según la lengua en la que te expreses y la religión que practiques.
9. CONOCER TUS ORIGENES, DE DÓNDE VIENES, TE PERMITIRÁ CONOCER A LOS DEMÁS.
En muchas situaciones actuamos de una manera que no puedes evitar y no sabes por qué lo haces. Es entonces, el saber cómo eran tus padres, tus abuelos y si tienes suerte, tus tátara abuelos, tendrán un valor importante. Como te comportes en la vida depende de muchos factores, pero la educación recibida en la infancia y la genética marcan una línea de actuación significativa.
La educación depende, al igual que el medio donde pases la infancia, del cuidado que hayan puesto en ti los progenitores o del medio rural o urbanita en el que hayas vivido.
Se han estudiado gemelos que han sido separados al nacer (guerra del pacífico, 1945, niños japoneses), uno se quedaron en Japón, otros fueron adoptados por familias de militares Americanos. Treinta años después se reencontraron en un programa estudiado científicamente: los niños que fueron adoptados en USA, eran; altos, con enfermedades corrientes en una cultura americana (diabetes, obesidad, alergias, traumas deportivos) y modismos típicos de la cultura americana (“easy going”). Los que quedaron en Japón; menor estatura, menos enfermedades y modismos típicos japoneses (pensamiento y respeto social, pulcritud).
Este programa demostró, como el medio ambiente (lugar geográfico, alimentación, clima, etc), actuaba sobre el aspecto exterior (fenotipo) e incluso en el comportamiento. Pero, se observó que el color de la piel, de los ojos o, el rizado del pelo respondía a la genética (genotipo). La genética encierra ciertas tendencias y gustos como por ejemplo; un niño adoptado en USA era bombero, el que se quedó en Japón, también; una niña adoptada se casó con un militar, la japonesa, también; otros dos fueron profesores de colegio y así un largo etc…
Conocer cómo eran y cómo actuaron tus antecesores cercanos y antiguos te da acceso a una información valiosísima para tener un libro de ruta en tu vida. Esto te da un consuelo y una sensación de que no estás solo y que debes sentir gratitud y respeto hacía los ancestros.
Cuando descubres quién eres y quienes eran tus ascendentes, descubres que TODOS SOMOS IGUALES con una banda de variaciones relativamente pequeñas. Por eso; conócete a ti mismo y conocerás a los demás.
10. LA RELIGIÓN ES UN CONSUELO PARA MILLONES DE PERSONAS.
Creas o no creas si el más allá existe o no:
“Debes esforzarte para ser dignos de él”. (Jules Renard)
El ser humano no puede vivir sin vida espiritual, de no ser así, no hablamos de un ser humano sino de una máquina evolutiva.
Imaginemos un neandertal de hace 100.000 años. Vive la oscuridad de la noche bajo la tenue luz de las estrellas y la trémula luz de la hoguera en lo profundo de una cueva oscura. Este duro ambiente le hace agruparse para defenderse con más eficacia de los animales, del frío y de los vecinos poco amigables. La conciencia, ha iniciado un camino lento desde hace millones de años, y está comenzando a alumbrar pensamientos producto de conexiones neuronales, que son el resultado de la evolución por adaptación al medio ambiente. Todavía estamos empezando.
La primitiva conciencia te hace sentir miedo a las sombras, no por la oscuridad sino por lo que se puede esconder en ella. Nace la imaginación. Entonces nos agrupamos, y el pegamento que lo logra es, una fuerza espiritual que te anima a fabricar pequeños amuletos y a perforarte la piel para distinguirte como un jefe o un chaman, o solo por la vanidad de ser diferente. Los tatuajes. Se ha necesitado millones de años para llegar a este NIVEL DE CONEXIÓN ENTRE EL MIEDO Y LA IMAGINACIÓN.
¿Por qué ha sido así y no ha sido otra especie la beneficiada por la evolución?
Posiblemente porque, el miedo que nos ha inducido la oscuridad, el dolor y los enemigos ha provocado que pensemos como medida de prevención. Ningún animal tiene miedo a la oscuridad o siente dolor con componente anímico y los enemigos responden a motivos de simple depredación. El ser humano cuando no conoce siente miedo y, para no sentirlo, ha desarrollado un cerebro basado en la imaginación. ¿Qué ha facilitado este proceso imaginativo?; la agrupación. ¿Qué es necesario cuando se forme un grupo?, que haya un jefe. ¿Quién está por encima del jefe? , un espíritu. Conclusión: Ha aparecido la religión y está animada por el «espíritu».
Un ateo, por mucho que lo intente nunca podrá decir que no cree en la vida espiritual ni en la religión, pues de ser así entra en contradicción: ¿Existen las religiones?, sí. ¿Son una evidencia?, sí. ¿Se puede reproducir una religión en cualquier lugar poniendo las mismas variables?, sí.
El método, no científico, dice:
“Aquí tenemos las conclusiones. ¿Qué datos podemos hallar para confirmarlas?
El método científico es opuesto: “Aquí tenemos los datos ¿Qué conclusiones podemos extraer de ellos?
Entonces, científicamente, podemos decir que una religión es un fenómeno evidente y reproducible. Es decir:
LA RELIGIÓN ES UN FENÓMENO CIENTÍFICAMENTE DEMOSTRABLE.
Pero, esto es más simple que las elucubraciones científicas: La religión da paz y consuelo a muchas personas tantas como el 56% de la población mundial (estadística mundial del año 2012). Con esos datos es suficiente para poder decir:
Sí, la religión es un consuelo para millones de personas y es algo que acepto, aunque yo no sea religioso.
Mi espiritualidad pasa por sentarme en una banqueta Zen.